Este Riesling de Lo Abarca, un pequeño pueblo ubicado a sólo 4 Km de la costa, en la región de San Antonio, es un vino fresco, con esos particulares aromas a petróleo propios de esta cepa.
En nariz presenta intensos aromas a frutas blancas tales como durazno, piña fresca y pera acompañadas por delicadas notas florales como jazmín con un toque de cascara de limon y jengibre. En boca, destaca su acidez vibrante con expresivas notas cítricas y mineral, desarrollando suaves sensaciones a miel, gasolina y sabores similares al queroseno, que aportan complejidad. Presenta un paladar medio estructurado, fresco, con una textura amplia y final anguloso.