Un clásico ejemplo de cariñena maulina, este muestra una selección de la variedad sobre los viñedos viejos de secano del cálido Maule. Sin crianza en barrica, solo en tanque de acero, y fermentado con levaduras nativas, este es generoso en aromas florales y frutales. La boca está marcada por esa acidez punzante tan característica de la variedad, mientras los sabores a frutas rojas hacen una pequeña fiesta.
Color rubí profundo e intenso con un toque de violeta. Este vino muestra una mezcla interminable de aromas tales como licor de cereza, regaliz, frutas negras y champiñones, con notas adicionales de albaricoques, melocotones y peras blancas. Elegante y maduro en boca es jugoso y redondo, mostrando notas de cassis, vainilla y grosellas negras, con una abundancia de taninos maduros y un final largo y complejo.
Se recomienda beber entre 16° y 18° C. Marida bien con carnes rojas a las brasas, estofados y jamones ahumados.